Carta del presidente

Estimados amigos:

La Fundación Andreia nace del interés y la generosidad de padres que buscan fomentar una excelencia en la educación, que entienden todo lo que nos jugamos en enseñar el arte de vivir a las generaciones futuras, y están decididos a invertir tiempo, capital y esfuerzo en ello.

Ninguna familia es una isla. Educar requiere el acompañamiento de otras familias, de otras instituciones y fundamentalmente del colegio, que colaborando con la familia abre un horizonte nuevo al hijo, que, como alumno y compañero, aprende a crecer y florecer en un nuevo marco de relaciones.

Los colegios Stella Maris, de los Discípulos de los Corazones de Jesús y María, ofrecen precisamente ese espacio educativo adecuado de grandeza, de maduración en virtudes y de crecimiento en la vida de fe.

Por ello, la Fundación Andreia concreta este interés suyo en la educación mediante  una serie de apoyos muy concretos a las familias para ayudarles a educar con excelencia en los colegios Stella Maris. En primer lugar, ofrece becas, para que ciertas familias puedan afrontar la escolarización de sus hijos en los colegios Stella Maris. Pero además, ofrece recursos para generar más excelencia en los propios colegios, fomentando la formación del profesorado, la atención a los padres y el cuidado de la excelencia en los alumnos.

La Fundación se concibe como un verdadero aliado dentro de la gran «alianza educativa» que se teje en los colegios Stella Maris. Con la magnanimidad de los patronos y miembros de la Fundación, con la colaboración de tantas familias de los propios colegios, con el apoyo y la presencia de los Discípulos de los Corazones de Jesús y María, se ofrece una verdadera red para fomentar la excelencia educativa.

Ojalá que esta Fundación pueda crecer con el tiempo y cada día ofrecer más ayuda y más facilidades a más familias. A la Madre, Santa María, Stella Maris, le encomendamos esta andadura,

P. Carlos Granados, DCJM

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